Humphrey Bogart en la mesa
del fondo, junto al piano,
se emborracha y de su mano
cuelga un rayo que no cesa
rubio y profundo. Le besa
dejándole en soledad.
Sólo el final es verdad,
un aeropuerto es un lienzo
y esto que acaba el comienzo
de una bonita amistad.
domingo, 23 de marzo de 2008
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